Auschwitz es una metáfora y una metonimia de los campos de exterminio y un símbolo y sinónimo de los crímenes nazis. Se refiere tanto a las víctimas del nazismo como a los perpetradores que huyeron después de la Segunda Guerra Mundial a Sudamérica, a veces en el mismo barco que los refugiados judíos. Desde el nuevo milenio puede constatarse un verdadero boom de textos literarios y fílmicos provenientes del Cono Sur que se apropian de esta temática y forman un nuevo subgénero de manifestaciones artísticas ficcionales y factuales que se analizan en este estudio. Mientras que los documentales, las novelas testimoniales, los testimonios de sobrevivientes judíos y las novelas autobiográficas recurren a una representación seria y realista, existe también una vertiente opuesta, provocadora e irreverente que se manifiesta en historias contrafácticas, sátiras malvadas, parodias espeluznantes o en caricaturas e historietas. Todas estas figuraciones revelan menos sobre el nazismo histórico que sobre los imaginarios que se vinculan a él, entre los que se destacan mitos y teorías de conspiración (Hitler en Argentina, el IV Reich, el oro nazi) y temas (des)tabuizados de colaboración, oportunismo y relaciones prohibidas.