Debajo una mañana de un coche se encontraba un gatito chiquitín que maullando estaba. Debajo una mañana de un coche se encontraba un gatito chiquitín que maullando estaba. ―Miau, miau ―decía muy triste se encontraba perdido y allí muy quietecito se había escondido. ―Miau, miau ―seguía maullando pero nadie le escuchaba todos estaban dormidos era por la madrugada. ―Miau, miau ―seguía y seguía y un niño le escuchó se levantó de la cama y la ventana abrió.