La Mentalidad De Éxito De Los Grandes Líderes. Yael Eylat-Tanaka
Читать онлайн книгу.la estabilidad de este pilar, el éxito podría resultar imposible de alcanzar y mantener, o incluso de reconocer. Las enseñanzas de Freud, Adler y Jung, entre otros muchos, se centran en este aspecto del éxito.
1 El pilar intelectual reúne toda la educación y formación recibidas para lograr los objetivos en la vida. Albert Einstein nos viene inmediatamente a la mente como el mejor ejemplo. La capacidad intelectual abre horizontes infinitos, al igual que la educación y la oportunidad de aprender y alimentar la curiosidad intelectual. El éxito duradero depende de este pilar.
1 El pilar profesional es realmente una combinación de la productividad de la educación y de la dedicación a un objetivo establecido. Ser un médico, un abogado o un jefe indio requiere firmeza y un compromiso inquebrantable con la causa. A este respecto, podríamos tomar a Jonas Salk y Louis Pasteur como ejemplos de profesionalidad que conduce hacia el éxito. De hecho, muchos más industriales visionarios honran las páginas de la historia por haber alcanzado las más altas cotas profesionales en el servicio a la sociedad. La autora ha incluido muchos de estos nombres en el texto.
1 El pilar económico depende de un amplio espectro de capacidades, así como de la previsión. La perspicacia y las habilidades fiscales de J. P. Morgan y Dale Carnegie son buenos ejemplos a seguir. Pero, como veremos, no es la acumulación de dinero lo que se traduce en éxito; más bien, es la sensación de consecución y no las ganancias económicas lo que está en juego. Tomada en conjunción con los demás pilares, junto con una planificación sólida, la habilidad económica puede constituir una poderosa fuente de beneficio, tanto para uno mismo como para la sociedad.
1 El pilar social podría parecer a primera vista superficial; sin embargo, son las conexiones con los demás las que podrían facilitar la consecución de objetivos a largo plazo.
1 El pilar espiritual comprende todas esas actividades intangibles, como pueden ser las creencias espirituales y la meditación personal. En nuestros tiempos hemos visto a la Madre Teresa de Calcuta y al Papa Francisco extender su mano compasiva para lograr un gran efecto. La capacidad de reflexionar y meditar y, lo que es más importante, apreciar los dones propios, podría muy bien ser el pilar más importante de todos.
Ninguno de los atributos anteriores se sostiene por sí solo. Al igual que un templo se construye sobre varios pilares, así es el nebuloso y misterioso concepto del éxito. ¿Qué podrá encontrar en las siguientes páginas? El mensaje más importante podría ser que no hay ningún secreto absoluto para el éxito. El éxito es una cuestión de enfoque y determinación sin un calendario. Es un continuum. Cada uno avanza a una velocidad diferente. Si la fama y la fortuna son consideradas como el resultado final, muchos se sentirán decepcionados. Sin embargo, los pequeños avances acumulados en el transcurso del tiempo suman hacia el logro real y podrían posiblemente conducir a la fama y a la fortuna deseadas. La fábula de Esopo de la liebre y la tortuga es relevante cuando pensamos en ello.
Este libro está concebido como una guía a prácticas y enfoques que muy a menudo son sutiles y abstractos. Los siete pilares no son exclusivos; se podrían incluir muchos otros. Una vez asimilados y practicados los principios subrayados aquí, el éxito es el resultado final inevitable. El viaje podría ser largo o corto, fácil o difícil, pero, en cualquier caso, es un viaje que todo el mundo puede emprender y ver resultados a su favor. Siga leyendo mientras traza el camino de su propio viaje hacia el éxito.
La autora de este libro no es extraña a los elementos que conducen al éxito. En una vida de reflexión personal y meditación, ha identificado más de 140 valores esenciales para vivir una vida plena. Los ha compilado en The Book of Values (El libro de los valores), una obra inspiradora concebida para ser leída una y otra vez. El éxito no es una experiencia singular sino una colección coloreada por un amplio espectro de cualidades personales. Cualidades como la integridad y la credibilidad podrían ser autoexplicativas; otras como el bushido (camino del guerrero) y la curiosidad podrían requerir una mayor reflexión. No obstante, al final la más importante podría ser perfectamente la gratitud. Debemos reconocer y admitir las influencias que nos han llevado hasta nuestra vida actual; si hemos alcanzado nuestro objetivo con magnanimidad y honestidad, o si aún estamos en nuestro viaje.
El tema del éxito es ingente. Embarcarse en una transformación total podría ser una tarea abrumadora. Los pequeños pasos en cualquier empeño son más fáciles de conseguir. Cuando se desglosan en pequeños pasos, todas las empresas resultan eminentemente más sencillas de alcanzar. Es cuestión de priorizar y dividir las metas en parcelas manejables. Uno de los empeños más intratables es mantener el peso. La autora ha tomado su experiencia para proponer cómo superar el problema del peso excesivo. Su fórmula la podemos encontrar en Diet Proof Your Life: The Seven Essential Secrets of Success (Su vida a prueba de dietas: los siete secretos esenciales del éxito). Los elementos del éxito en esta tarea son similares a los propugnados en The Book of Values (El libro de los valores).
Como podrá ver, el éxito depende de la participación activa, del compromiso total y de la reflexión de todo lo que es importante para vivir una vida plena.
John E. Christ, MD, Ph.D.
Tampa, 2015
INTRODUCCIÓN
“Si tienes tanto talento, ¿por qué no eres rico(a)?” He oído variaciones sobre este tema muchas veces a lo largo de mi vida, siempre con un matiz de reproche o de burla absoluta.
El mensaje es claro: talento significa éxito; éxito significa riqueza. Que el éxito pueda tener muchos otros componentes normalmente no cuenta para dichas opiniones. De hecho, a menudo me he preguntado acerca de mis propios logros: tengo muchas habilidades, y algunas de ellas me han servido bastante bien. Pero si el éxito se mide en ganancias monetarias, un salario de 6 cifras, un Rolls Royce en el garaje y una cuenta bancaria importante, ¡definitivamente no me encuentro dentro de ese terreno! De acuerdo con ese modelo, no lo he “conseguido”.
Una conclusión de lo anterior es el comentario, “Si eres tan rico(a), ¿por qué sigues trabajando?” De nuevo, el supuesto es que una vez que lo “has conseguido” y has amasado suficiente dinero, deberías tumbarte con un Margarita en una hamaca en la playa y ver la vida pasar. De hecho, es bastante popular ensalzar los méritos de retirarse pronto, con algunas personas destacadas retirándose en la veintena, la treintena o la cuarentena.
¿Es eso éxito?
Donald Trump dijo “El dinero nunca fue una gran motivación para mí, excepto como una forma de llevar la puntuación; lo verdaderamente excitante es jugar el juego”. Estoy totalmente de acuerdo. Muchas personas en la sociedad actual evitarían esta observación por ser engañosa; pero, de hecho, el dinero es solo un medio para un fin y únicamente es válido como tarjeta de puntuación. Esto podría validar perfectamente el punto de vista de los cínicos de que si uno tiene talento, la “tarjeta de puntuación” debería reflejarlo. Pero se perderían un excelente punto contenido en la cita anterior: la excitación inherente a jugar el juego.
Nuestras vidas se han plagado de una sobrecarga de información, proyectos a completar, actividades extracurriculares y calendarios de trabajo exigentes. Somos bombardeados constantemente con todo tipo de promociones, anuncios de televisión, sitios de redes sociales, ofertas de correo directo y seminarios en línea, todos ellos ostensiblemente diseñados para mejorar nuestras vidas. “¡Consigue todo lo que puedas!” anuncian; “Gana más dinero!“ “¡Alcanza las estrellas!” “¡Sé todo lo que puedes ser!” “¡Rompe tus propias barreras!” proclaman a bombo y platillo. Por supuesto, muchos de estos programas están basados en una buena investigación científica y son, sin duda, legítimos. No son los programas en sí mismos los que han de cuestionarse; es su enfoque.
Escribí este libro para divulgar mi percepción de que el éxito es mucho más que dinero y riquezas. La verdadera riqueza es la vida en sí misma: salud, amigos, lazos familiares, conexiones, serenidad. Estos elevan el espíritu humano y personifican cualidades de gratitud por todos los aspectos de la vida. Todo aquel que ha superado la adversidad y ha salido indemne, incluso mejor tras haberla