Naturaleza y conflicto. Danilo Bartelt Dawid
Читать онлайн книгу.quedó poco o nada para el bien de la sociedad en general. Hoy es necesario expresar dudas bien justificadas cuando los gobiernos latinoamericanos le adjudican los abusos locales exclusivamente al capitalismo o al imperialismo. Pero, por lo menos para tres de los cinco siglos tras la conquista, aún es válida la imagen de “las venas abiertas de América Latina”,[18] que acuñó el autor uruguayo Eduardo Galeano con su libro del mismo nombre, incluidos los efectos secundarios y las secuelas provocados hasta el día de hoy por estas estructuras.
[1] N. Rehrmann, Simón Bolívar. Die Lebensgeschichte des Mannes, der Lateinamerika befreite, Berlín, 2009.
[2] F. Nelle, Atlantische Passagen. Paris am Schnittpunkt südamerikanischer Lebensläufe zwischen Unabhängigkeit und kubanischer Revolution, Berlín, 1996; J. Streckert, Die Hauptstadt Lateinamerikas. Eine Geschichte der Lateinamerikaner im Paris der Dritten Republik (1870-1940), Colonia, 2013.
[3] S. J. Feres Júnior, “El concepto de América Española en Estados Unidos: De La Leyenda Negra a La Anexión Territorial”, Historia Contemporánea 28 (2004), p. 61-79; H. Pietschmann, “Lateinamerikanische Geschichte und deren wissenschaftliche Grundlagen: Versuch einer Standortbestimmung” en W. L. Bernecker et al. (comps.), Handbuch der Geschichte Lateinamerikas, vol. 1, Stuttgart, 1994, pp. 1-22; aquí, p. 7.
[4] Cfr. al respecto, por ejemplo, J. Becker, “Die Mitte-Links-Regierungen in Lateinamerika und die große Krise” en Links-Netz (agosto, 2009). Disponible en: [www.links-netz.de/K_texte/K_becker_mittelinks.html].
[5] Así lo afirma D. Boris, Bolívars Erben. Linksregierungen in Lateinamerika, Colonia, 2014, pp. 15 ss.
[6] Ibid., pp. 22 s.
[7] C. de la Torre, “The Resurgence of Radical Populism in Latin America” en Constellations 14, 3 (2007), pp. 384-397.
[8] Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Panorama social de América Latina 2017, Santiago, 2017.
[9] En todo el continente estos programas llegaron a 12% de los hogares, lo cual corresponde al número de los hogares en pobreza absoluta en 2013. Véase: A. Barrientos, “Die neue Sozialhilfe Lateinamerikas” en Nueva Sociedad, edición especial (junio, 2012), p. 9 s.; Cepal, op. cit., p. 65.
[10] Véase, por ejemplo, D. Hailu y F. Veras Soares (comps.), Cash Transfers. Lessons from Africa and Latin America, Brasilia, agosto de 2008 (Poverty in Focus 15).
[11] Véanse: [https://theglobalamericans.org/2017/07/shifting-trade-landscape-latin-america-favors-china-globalization/]; [https://www.nzz.ch/international/china-baut-einfluss-in-lateinamerika-rasant-aus-ld.1390173].
[12] Armando Barrientos brinda una visión panorámica comprometida y más joven. Op. cit., pp. 4-18.
[13] E. Lander, “Die Regierung sabotiert sich”, die tageszeitung, 10 de julio de 2014. Disponible en: [www.taz.de/1/archiv/digitaz/artikel/?ressort=ku&dig=2014%2F07%2F09%2Fa0104&cHash=77a8ba7891138de41b903366a14a417e].
[14] N. Rattunde, “190 Jahre bolivianische Unabhängigkeit” en ila, septiembre de 2015, p. 45.
[15] Un muy buen panorama general sobre la historia y la situación actual de la “cuestión indígena” en América Latina, hasta comienzos de la década de los 2000, lo presenta Juliane Ströbele-Gregor: “Indigene Völker und Gesellschaft in Lateinamerika: Herausforderungen an die Demokratie” en H. Feldt (comp.), Indigene Völker in Lateinamerika und Entwicklungszusammenarbeit, Eschborn, 2004, pp. 1-27.
[16] Latin American Special Report, septiembre de 2003, p. 3 s.
[17] P. Vaz de Caminha, Carta a El Rei D. Manuel, 1 de mayo de 1500. Disponible en: [www.dominiopublico.gov.br/download/texto/bv000292.pdf].
[18] E. Galeano, Las venas abiertas de América Latina, México, 42015. En la Cumbre de las Américas de 2009, Hugo Chávez le entregó públicamente al presidente estadounidense Barack Obama un ejemplar del libro.
CAPÍTULO II
(Neo)extractivismo: en la naturaleza del conflicto
Uno camina sobre el agua, el segundo la vadea y se sumerge en ella. El tercero marcha con las botas secas sobre los guijarros que debían albergar un río. Uno vive en el área metropolitana de Río de Janeiro, el segundo en la selva tropical de Perú, el tercero en las estribaciones de los Andes en Chile. Uno pesca, el otro draga; el tercero siembra, escribe y habla. La cotidianidad de los tres está marcada por el extractivismo. Y todos ellos viven y trabajan en territorios.
Territorio
El debate y la controversia sobre el extractivismo en América Latina resultan incomprensibles sin el concepto territorio. En las ciencias políticas éste tradicionalmente designa al ámbito del Estado nacional en el que coinciden el derecho, la lengua y la esfera de dominio del gobierno: un espacio definido geográficamente por las fronteras nacionales y determinado por la soberanía del Estado; uniforme y homogéneo, como lo define el ideal.
La reciente geografía crítica se ha distanciado de esta conceptualización. En el debate latinoamericano, territorio ahora se entiende sobre todo como el área (natural) a la cual se quiere expandir un cierto tipo de explotación económica de la naturaleza, pero en la que ya existe otra praxis económica y otra forma de vida. Dicho concepto designa espacios en los que está activo el extractivismo, mismo que desencadena conflictos específicos de apropiación y explotación con la población que vive en él, porque conlleva complejas consecuencias para sus formas de vida y sus derechos.
El núcleo de estos conflictos lo constituye la pregunta: ¿Quién tiene acceso al territorio y a lo que se halla encima y debajo de la tierra; quién tiene el poder de disponer sobre ello y cómo lidian los diferentes actores con los elementos naturales y con las formas de vida y de producción que existen en esos espacios?
El territorio es tierra, y en la historia latinoamericana la tierra ha sido objeto de disputas desde la época colonial. La cuestión de la tierra ha provocado revoluciones. Los muchos campesinos