¿Quién paga la deuda?. Bob Traa
Читать онлайн книгу.crecer eternamente, sin límite de visión —prometen que todo estará bien en el futuro, siempre y cuando ellos sean elegidos—. Esto no tiene sentido. Es muy importante que se entienda cuánto puede producir la economía (el PIB potencial), para que las esperanzas de la gente no desmayen constantemente y para que, más bien, las políticas puedan estar basadas en expectativas más realistas.
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Población en edad laboral (PEL). Nos gustaría explicar más precisamente la relación entre demografía y economía. Por esta razón, vamos a tratar de desagregar el concepto amplio de población en sus partes. En primer lugar, podemos dividir la población total en dos grupos: los que tienen edad laboral y los que no tienen edad laboral. En la mayoría de países, la población en edad laboral es aquella entre 15-65 años de edad. La gente menor de 15 años es joven y los mayores de 65 años son adultos mayores. Así, ahora podemos dividir la población en dos grupos: población en edad laboral (15-65) (PEL) y dependientes (<15 and >65) (DEP). El gráfico 2 muestra esta desagregación para la población ecuatoriana de 1950-2100.
POB = PEL + DEP
Gráfico 2. Población en edad laboral y población dependiente (1000)
Fuente. ONU y cálculos del autor.
El gráfico 2 muestra que la población en edad laboral es significativamente menor que el total de la población y que el número de dependientes está constantemente en crecimiento. Esto tiene implicaciones adicionales para la macroeconomía. Por ejemplo, la población en edad laboral alcanzará su punto máximo, aproximadamente, en 2060, lo cual es más temprano que para la población en general. Eso significa que el potencial económico del Ecuador también alcanzará su punto máximo antes de que el país logre su mayor nivel poblacional. El número de empleados que pueden colocarse en sitios de trabajo dentro de una economía se desprende de la población en edad laboral, que será menor que la población total.
Asimismo, a medida que crece la dependencia, un número menor de población en edad laboral debe producir bienes y servicios para un número mayor de población dependiente, especialmente adultos mayores. El gráfico 2 no muestra eso, sino que el aumento en la dependencia viene especialmente de las personas de más edad, porque ellas necesitan pensiones, cuidado de salud y otros tipos de cuidados y el costo de esos servicios es alto para cualquier economía.
Por tanto, es importante estar preparados para aceptar que estas relaciones cambian con el tiempo a medida de que la población envejece. Esto es lo que se describe en la literatura como “envejecimiento” y la sociedad debe tener buenas políticas operativas en funcionamiento para poder cuidar de la población que envejece y las cifras de esta población se volverán más significativas en el futuro. Pero uno tiene que anticiparlo.
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La tasa de dependencia (TD). Uno se preguntaría, ¿cómo evoluciona a través del tiempo la relación entre la población en edad laboral y los dependientes en la sociedad?, de modo que podamos usar esto para calcular lo que necesitan los presupuestos futuros en la administración del bienestar social; o sea, ¿cómo organizar el sistema, en sentido amplio, del Seguro Social?
Esto se demuestra, en parte, en la tasa de dependencia (TD) que puede calcularse en el número de personas dependientes en la economía dividido para el número de población en edad laboral, como lo vemos en el gráfico 3.
TD = DEP/PEL
Gráfico 3. La tasa de dependencia (%)
Fuente. ONU y cálculos del autor.
El gráfico muestra que, en los años 1950-1960, la tasa de dependencia era bastante alta, de 80-100 %. Esto significa que, por cada joven o adulto mayor, había una persona en edad laboral (potenciales empleados). Así, la habilidad de la economía, compuesta por personas de edad laboral que cuidan de los jóvenes y adultos mayores, era de proporción de 1:1. Con el tiempo, esta proporción de dependencia ha disminuido a medida de que más personas jóvenes se unen a la población en edad laboral; pero la tasa de nacimiento en Ecuador también disminuyó, dando como resultado que había menos personas jóvenes en la población.
En 2020, la dependencia está casi en su proporción más baja pronosticada para todo el periodo —de alrededor del 54 %—, lo cual significa que, por cada persona dependiente hay aproximadamente 2 personas en edad laboral. Si más personas en edad laboral se encargan de menos personas dependientes, la carga de los dependientes se hace más llevadera. Pero cabe notar que se pronostica que la proporción de dependencia aumentará en el futuro a 80 %. Cuando esto suceda, y seguramente sucederá, especialmente a causa del envejecimiento y jubilación de las personas, los desafíos para alcanzar el bienestar social se incrementarán otra vez. La política y la economía, generalmente, necesitan anticipar las necesidades y prepararse para afrontarlas.
Conclusiones preliminares
• El crecimiento de la población está disminuyendo y se espera que la población llegue a su punto máximo alrededor de 2080, a unos 25 millones de habitantes.
• La tasa de crecimiento de la población en edad laboral también está disminuyendo y se espera que el número de personas en esta subpoblación llegue a su punto máximo más temprano —alrededor de 2060—.
• La tasa de dependencia está en su punto casi más bajo en este momento y se espera que comience a subir nuevamente a medida que la población envejece.
• La economía tiende a estar atada a la población y su tasa de crecimiento. Las poblaciones más pequeñas tienden a economías más pequeñas; las poblaciones más grandes tienden a economías más grandes. La tasa de inversión y la capacidad de construir stock de capital —generando productividad laboral— es el segundo factor que determina el tamaño del PIB.
• El lento crecimiento demográfico general también hará que disminuya la tasa de crecimiento económico potencial y actual.
• El tamaño de la población no determina el estándar de bienestar per cápita en la economía. A veces, un tamaño menor tiene sus ventajas.
• La política, en general, y especialmente la política económica, necesita anticipar las tendencias demográficas (crecimiento) y prepararse para el envejecimiento de la población (presión fiscal).
• En el próximo capítulo, vamos a dividir a la población en edad laboral en tres partes para explicar más precisamente la relación entre la población y el tamaño de la economía. Para tomar decisiones con respecto a la política económica y la política en general, es muy importante conocer cuáles son los límites de la economía y qué es lo que esta puede producir.
La población económicamente activa: empleo y desempleo
La participación en el proceso laboral es importante para la producción del PIB
En el capítulo 1 tratamos la relación del tamaño de la economía y la población. Luego, separamos la población en dos grupos: los que están